La tradicional entrega de los Premios Física RSEF-FBBVA tuvo lugar el pasado jueves 14 de diciembre en la sede de la Fundación BBVA, sita en el Palacio del Marqués de Salamanca, Paseo de Recoletos, 10 en Madrid.
El Premio Investigador Joven en Física Teórica, ha sido otorgado a Dª. Irene Valenzuela Agüí Postdoctoral position, Harvard University, en la actualidad contratada Ramón y Cajal del Instituto de Física Teórica UAM, UAM-CSIC
El jurado destaca la alta repercusión de sus aportaciones en el estudio de las inestabilidades de modelos no supersimétricos de teoría de cuerdas y sus implicaciones en cosmología y física de partículas. Su trayectoria y sus resultados de investigación en centros de excelencia internacionales la han convertido en un referente en el campo de la gravedad cuántica y teoría de cuerdas.
CONTRIBUCIÓN
Una de las cuestiones que más ha llamado siempre la atención de Irene Valenzuela ha sido entender si el universo es o no infinito. Eso, junto con su afán por entender el funcionamiento de las cosas y su fascinación por las estrellas, le llevó a estudiar Física. «Buscaba responder lo que a mí me parecían las preguntas más fundamentales y para ello tenía que trabajar con una teoría de gravedad cuántica», explica Valenzuela, que es investigadora Ramón y Cajal en el Instituto de Física Teórica de la Universidad Autónoma de Madrid-CSIC.
Su trabajo se centra en determinar cuáles son las propiedades generales que vienen de la gravedad cuántica y pueden tener implicaciones para la física de partículas y la cosmología. «Me centro sobre todo en teoría de cuerdas, pues es la mejor candidata que tenemos para describir todas las fuerzas fundamentales, incluyendo la gravedad, y uniéndola con la mecánica cuántica», indica la premiada.
«Hay gente que piensa que trabajar en gravedad cuántica es un ejercicio puramente teórico y que no tiene implicaciones para lo que observamos. Esto se debe a que la gravedad es muy débil, y por eso pensamos que los efectos de la gravedad cuántica solo son apreciables a escala de energía muy alta», añade. Entre los resultados más significativos de su trabajo, destaca la línea de investigación del swampland. «Esta línea ayuda a determinar las condiciones que la gravedad cuántica impone a bajas energías. Al ser un campo nuevo, muchas de esas condiciones se formulan en términos de conjeturas que hay que estudiar para poder comprobarlas. Me he dedicado a verificar estas conjeturas dentro de la teoría de cuerdas, usando teoremas de geometría algebraica y topología, y a estudiar cuáles serían las implicaciones fenomenológicas que vienen de las conjeturas», explica.
Para Valenzuela, la investigación básica es importante porque «nunca sabes a dónde te puede llevar. La electricidad, por ejemplo, era investigación básica en su momento. Es esencial tener una visión a largo plazo y potenciar la curiosidad humana a donde sea que nos lleve, sin estar centrado en cuál es la aplicación inmediata que podemos sacar de ello».
Este premio no es solo un reconocimiento a su trabajo. «Lo veo como una oportunidad para llevar este campo de investigación al público general y contagiar esa emoción por lo que hago y por la física teórica».
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