Primera participación de la Universidad Autónoma de Madrid en el Willem C. Vis Moot

Tras meses de intensa preparación y un proceso académico de alto nivel, la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha participado por primera vez en la 32ª edición del Willem C. Vis Moot, celebrado en Viena. Esta competición de arbitraje comercial internacional reúne cada año a más de 390 universidades de todo el mundo, con el objetivo de formar a juristas especializados en la resolución de conflictos mediante el arbitraje y el estudio de la Convención de Viena sobre Compraventa Internacional de Mercaderías (CISG). 

La participación de la UAM ha requerido un sólido compromiso académico y formativo. El equipo, compuesto por estudiantes de la Facultad de Derecho y sus entrenadoras Beatriz Gregoraci (Profesora Titular de Derecho civil de la UAM), Elena Gillis (Abogada de Litigación Internacional y Arbitraje de Uría Menéndez) e Iciar Álvarez (Abogada de Litigación Internacional y Arbitraje de Uría Menéndez), asumió el reto de analizar un caso práctico centrado en la construcción de una planta de hidrógeno verde. Durante la fase escrita, se elaboraron dos memorandos (demandante y demandado), presentados entre diciembre de 2024 y enero de 2025. Estas semanas de investigación y redacción fueron esenciales para profundizar en cuestiones sustantivas y procesales, siguiendo la metodología del Vis Moot que refuerza el análisis doctrinal y jurisprudencial. 

En la fase oral, se desarrollaron sesiones de práctica exhaustiva, con ejercicios de oratoria jurídica, control del lenguaje no verbal y adaptación estratégica del alegato ante diferentes tipos de tribunales arbitrales. Esta formación intensiva contribuyó a que la UAM desempeñara un destacado papel en los Pre-Moots de Madrid y Bonn, enfrentándose con éxito a universidades europeas de reconocido prestigio. 

Del 10 al 18 de abril de 2025, el equipo viajó a Viena para medir sus habilidades con estudiantes y profesionales de todo el mundo. En las rondas generales, la UAM defendió las posiciones de demandante y demandado frente a universidades de India, Estados Unidos, Ucrania y Turquía, evidenciando tanto la solidez argumentativa lograda en la fase escrita como el dominio escénico adquirido en las prácticas orales. Aunque finalmente no logró el pase a la fase eliminatoria, el equipo dejó una sólida impresión por su nivel técnico, capacidad comunicativa y rigor jurídico. 

Con este logro, la UAM se consolida como una institución con clara vocación internacional, reforzando el carácter práctico de sus programas de estudio y la excelencia académica de su alumnado