La calidad de los espermatozoides en el sapo corredor muestra variaciones estacionales

Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) han demostrado que los espermatozoides del sapo corredor (Epidalea calamita) obtenidos en otoño —época no reproductiva en esta especie— presentan una peor resistencia a ser refrigerados o congelados, en comparación con los obtenidos durante la época reproductiva.

El trabajo, publicado en la revista Aquaculture, y en el que también participa un investigador de la Universidad Estatal de Misisipi, muestra cómo los espermatozoides obtenidos tanto dentro como fuera de la época de reproducción presentan una calidad similar cuando son evaluados en fresco. Sin embargo, tras su almacenamiento a 5ºC o su congelación, la viabilidad y motilidad de los espermatozoides obtenidos fuera de la época de reproducción fue inferior a la de los espermatozoides obtenidos durante la época de reproducción.

“La viabilidad espermática se relaciona con el porcentaje de espermatozoides vivos, mientras que la motilidad se corresponde con el porcentaje de espermatozoides que se mueven. Tradicionalmente se han utilizado estos parámetros para estimar la calidad y capacidad fecundante de una muestra de espermatozoides”, explica Lucía Arregui, primera firmante el estudio. 

“Sin embargo —agrega la investigadora— hemos observado que, aunque los espermatozoides en ambas épocas parezcan iguales, pues su motilidad es similar, no lo son pues responden de manera diferente a la refrigeración y la congelación”.

El desarrollo de técnicas de reproducción asistida, como el almacenamiento a corto o largo plazo de gametos, así como la fecundación in vitro, es fundamental como alternativa complementaria para la conservación de especies amenazadas como los anfibios.

“Sería interesante poder congelar los espermatozoides obtenidos fuera de la época de reproducción, pues así no interferimos con la reproducción natural de la especie”, explica Paula Boveda, coautora del trabajo.

Por su parte, el también coautor Jaime Gosálvez, agrega que “estos resultados ponen de manifiesto la necesidad de ajustar los protocolos de criopreservación a la época del año en el que se obtienen los espermatozoides, así como la necesidad de utilizar otros parámetros espermáticos para estimar la capacidad reproductiva de estas células”.

Una técnica antigua con un nuevo objetivo

Como parte del experimento, varios machos de sapo corredor fueron tratados con hormonas para estimular la liberación de los espermatozoides almacenados en el testículo, que luego fueron recuperados en la orina de los animales. Se utilizó  el sapo corredor, que es una especie no amenazada, como modelo para otras especies de anfibios amenazados.

Esta técnica se basa en la popular prueba de embarazo de los años 60 conocida como “prueba de la rana”. Así se obtuvieron espermatozoides fuera de la época de reproducción (octubre y noviembre) y durante la época de reproducción (febrero y marzo).

Estos espermatozoides fueron analizados en fresco para conocer su calidad, evaluados nuevamente tras ser mantenidos 24h en refrigeración y, posteriormente, criopreservados. Unos meses después fueron descongelados y utilizados para fecundar los huevos de una hembra y se observó el desarrollo embrionario.

 “Conocer la fisiología de los espermatozoides en distintas épocas es fundamental de cara a su utilización en reproducción. Así, en este trabajo hemos utilizando una técnica antigua para un fin nuevo: la conservación de especies amenazadas”, concluyen los autores.

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Referencia bibliográfica:

Arregui. L., Bóveda, P., Gosálvez, J., Kouba, A.J. 2020. Effect of seasonality on hormonally induced sperm in Epidalea calamita (Amphibia, Anura, Bufonidae) and its refrigerated and cryopreservated storage. Aquaculture 529, 735677

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