Durante la semana del 7 al 11 de julio, el Campus Joven Internacional UAM reunió a un equipo de jóvenes que vivieron una inmersión única en el entorno universitario, combinando ciencia, creatividad y reflexión en un formato lúdico y participativo.
Las jornadas comenzaron con una visita guiada al campus de Cantoblanco, incluyendo el campus agroecológico, un espacio verde que conecta sostenibilidad, biodiversidad y aprendizaje al aire libre. A lo largo de la semana, los y las participantes descubrieron aspectos fascinantes del conocimiento a través de talleres como “El fascinante mundo de los cristales”, “Pompas” o “Objetos históricos en 3D”, donde la ciencia se volvió tangible y divertida.
Los futuros universitarios también exploraron la dimensión más humana de la investigación con actividades como “Memoria de Testigos”, “Mujer y Ciencia” o “Los secretos de la mirada”, y se convirtieron en “Antropólogos por un día” para entender cómo se investiga el pasado desde la perspectiva de las ciencias sociales.
En el plano científico-tecnológico, destacaron experiencias como la visita al Centro de Computación Científica, el taller “¿Cómo piensa un robot?”, el dinámico Juego de la Oca del desarrollo de fármacos, y la visita al impresionante Acelerador de Partículas, una actividad que dejó a todos y todas con la boca abierta.
También hubo espacio para la reflexión sobre el consumo responsable y la sostenibilidad en el taller “¿Cómo perciben los consumidores la calidad y el valor de los productos?”, y para la exploración del entorno natural con “La piel viva del suelo”. Además, los y las jóvenes pudieron refrescarse en la piscina del campus, en sesiones de ocio compartido que reforzaron los lazos entre participantes.
El Campus Joven Internacional UAM cerró su edición 2025 con una excelente acogida y una energía contagiosa que reafirma el compromiso de la universidad con la divulgación, la inclusión y el aprendizaje a través de la experiencia.
Una semana intensa, enriquecedora y repleta de descubrimientos, en la que el futuro del conocimiento pasó por las manos de quienes pronto lo construirán.